El pasar de la noche me hace impaciente, me toco, me excito pensando en ti. Sé de tu arribo en ese preciso instante. Me pregunto si esta vez tocaré hasta el ultimo centímetro de tu piel... Aún no me imagino que esperar; Contigo siempre es diferente, lo cotidiano no lo conoces. Yo por el contrario, me hago a la idea que esto debe y tiene que ser más que una rutina, un futuro, un siempre.

Me pregunto... ¿Será posible que tu forma de amar cuando penetras mi mente es siempre igual que con los demás? Sí, lo mas probable es que sí. Pero para mí es diferente, y eso es lo que cuenta.

Tus besos, tus caricias, tu olor a sexo. Ese aroma tan conocido, tan misterioso, tan seductor, tan sensual. Por el y por ti sigo ahí, esperando escuchar tus pasos subiendo las escaleras, tres pasos que me provocan un éxtasis incontrolado.

Cada vez que sé que llega ese momento, espero estoicamente impaciente por esas manos que se introducen por todo mi ser. Tan sumiso, tan ingenuo, tan degenerado. Por ti y por lo que me has enseñado me permito tantas cosas, esas que se resguardan silentes por una experiencia más. Por esos centímetros de más, por esos minutos demás, por esa fuerza jovial.

Una vez más...

Tan igual, tan diferente...

__________________________________

De mi amigo Dadavo y le debo seguir:

Estas líneas fueron escritas a causa del juego/premio "Relato 10 lineas del sexo" donde un amigo bloguero te invita y nomina para escribir 10 lineas de poesía o prosa en donde el sexo sea el tema. La invitación que se me hizo fue por parte de mi amigo Henmex administrador del blog Haciendo las Américas. Y bueno ahora me toca invitar a participar a 3 blogueros para que sigan con esta cadena de relatos, voy a invitar a:



Comentarios

Entradas populares de este blog

Cuando uno prende el boiler y no se mete a bañar

Bestiario conversacional menstrual

Mi inspiración